Ingredientes
- 2 latas de tomate de 450 gr.
- c/n de aceite para freír
- ½ taza de jengibre fresco rallado
- 3 cucharadas de garam masala en polvo
- ½ taza de pasitas negras
- 1 cucharada de pimientos rojos picantes (peperoncillo chino, pero puede ser sustituido por ají dulce)
- 1 pimentón rojo picadito
- 2 dientes de ajo triturados
- 4 cucharadas de azúcar morena
- 1/2 taza de vinagre de sidra o de vino
- 4 o 6 clavos de olor
Preparación
- En una olla mediana, sofreír la cebolla, ajo y jengibre, sin dejar que los vegetales se pongan marrones
- Añadir el garam masala y cocinar por 3 minutos más. Cuando se desprenda el olor de esta especia, agregar el resto de los ingredientes y dejar cocinar a fuego medio por 30 minutos.
- Al estar listo se escurre el jugo que se reserva para otra receta (por ejemplo, las berenjenas agridulces) y se pone en un recipiente de vidrio en el refrigerador.
Este chutney lo comí en casa de José Luis y Evelyn durante una cena hindú que Eve preparó y de la que yo, muy a mi pesar, no pude disfrutar mucho porque todos los platos eran muy picantes.
Eve sirvió este chutney con pechugas de pollo deshuesadas, cortadas en tiritas, marinadas en jugo de limón con 2 dientes de ajo y 2 cucharadas de aceite, sofritas luego en un poquito de aceite.
A mi me pareció entonces que los amantes de la carne roja podrían disfrutar de este delicioso chutney con una buena punta trasera asada a la parrilla.