Ingredientes

  • 1-1/4 tazas de leche
  • 1 cebolla mediana cortada en juliana
  • 1 hoja de laurel
  • 4 o 5 calabacines grandes pelados y cortados en rodajas gruesas
  • Laurel en polvo
  • Sal y pimienta
  • ½ barrita de margarina (50 gr.)
  • 2 cucharadas de harina
  • 1 cucharada colmada de salvado de trigo
  • 2 huevos separadas yemas y claras
  • ½ taza de queso parmesano rallado
  • Margarina para engrasar el molde

Preparación

  • Precalentar el horno a 200º
  • Calentar la leche con la cebolla y la hoja de laurel, sin dejar hervir.
  • Dejar reposar hasta que la leche esté fresca (20 minutos aproximadamente)
  • Cuando haya reposado, colar la leche, desechar la hoja de laurel y reservar la cebolla.
  • Cocinar los calabacines al vapor. Salpimentar y poner laurel en polvo. Cuando estén cocidos, poner a escurrir
  • En sartén mediana, poner a derretir la margarina. Mezclar con la harina y el salvado, cocinando a fuego lento por unos minutos. Añadir la leche poco a poco hasta que se forme una crema espesa.
  • Retirar del fuego e incorporar las yemas de huevo revolviendo bien
  • En un envase profundo, poner los calabacines, las cebollas, el queso y la salsa. Mezclar Añadir las claras batidas a punto de suspiro con movimiento envolvente.
  • Engrasar un recipiente redondo profundo. Verter la mezcla en él y hornear por 30 minutos o hasta que el centro quede consistente y la superficie se vea dorada.